Lo que aprenden de la naturaleza
En casa, las oportunidades de experimentar nuevas sensaciones son pocas. Al aire libre, tienen un mundo infinito y excitante por delante. Este desmedido afán de aventura no debería frenarse salvo en caso de riesgo para el niño o si su conducta puede causar algún daño al entorno.
El contacto con la naturaleza hace al niño consciente de sus propias limitaciones físicas. Por ejemplo, el agua no puede retenerse, la arena se escapa entre los dedos, la piedra es demasiado pesada, algunas plantas pinchan si uno las quiere agarrar... Pero de estas mismas frustraciones, el pequeño extrae un gran saber sobre el funcionamiento del mundo que lo rodea.
En casa, las oportunidades de experimentar nuevas sensaciones son pocas. Al aire libre, tienen un mundo infinito y excitante por delante. Este desmedido afán de aventura no debería frenarse salvo en caso de riesgo para el niño o si su conducta puede causar algún daño al entorno.
El contacto con la naturaleza hace al niño consciente de sus propias limitaciones físicas. Por ejemplo, el agua no puede retenerse, la arena se escapa entre los dedos, la piedra es demasiado pesada, algunas plantas pinchan si uno las quiere agarrar... Pero de estas mismas frustraciones, el pequeño extrae un gran saber sobre el funcionamiento del mundo que lo rodea.